miércoles, 16 de septiembre de 2015

Rafael Yuste y el Proyecto BRAIN



Cada vez es más patente que la conducta humana está regida por algoritmos matemáticos (embebidos en los circuitos neuronales mediante un proceso evolutivo). Es algo que este propio investigador (Rafael Yuste) menciona al final del vídeo, y algo que se da ya por supuesto dadas las iniciativas como la de este proyecto BRAIN (ya que, evidentemente, si no se pensara así, no tendría sentido el propio proyecto).

Pero la cuestión de fondo es que, si la conducta humana no es más que un conjunto de algoritmos interactuando en diversos circuitos neuronales: ¿hemos por fin cerrado el debate del libre albedrío? Porque es sabido que NO es posible lograr una verdadera libertad de acción mediante algoritmos matemáticos (es algo de perogrullo). Un algoritmo es, por definición, un proceso determinista (incluso si el algoritmo se computa de un modo no secuencial o en paralelo, da lo mismo).

De este modo, la ilusión de libertad que todos poseemos sería, en tal caso, sólo un espejismo de esa circuitería neuronal, que haría uso del ruido eléctrico de fondo para inducir una pseudoaleatoriedad que serviría para permitir un mayor grado de libertad a los animales dentro de un mundo tan heterogéneo e imprevisible. Esta pseudoaleatoriedad ayudaría a aumentar el abanico de actuaciones posibles ante un desafío natural, lo cual beneficiaría a los fines evolutivos y por tanto sería seleccionado. Y hay ya estudios, además, que apoyan esta hipótesis  (podéis buscar en Google). Un ejemplo de estos estudios, consistió en leer el rudio neuronal de un sujeto en un experimento (mediante fMRI), antes de poner al sujeto ante la dicotomía de tener que elegir entre dos opciones (cara o cruz, izquierda o derecha, etc.). Se comprobó que la decisión del sujeto de estudio por una u otra alternativa estaba DETERMINADA de antemano por el ruido eléctrico de su cerebro, y que incluso se podía prever la decisión del individuo simplemente con observar dicho ruido antes de la decisión.

Por tanto, la propuesta de que sólo somos máquinas (autómatas) de reproducir genes (un soma desechable) toma más fuerza que nunca. Porque ese "somos", ese "nosotros", o ese "Yo", que conforman nuestra consciencia y sociedad, resulta que puede no ser más que un conjunto de algoritmos matemáticos que determinan lo que debemos hacer (en favor de los "intereses" evolutivos que nos dieron forma, evidentemente).

Un saludo.

2 comentarios:

Sergio Hernandez dijo...

Hola Samu, paseando por tu blog en busca de joyas he leido algo con lo que no estoy de acuerdo: "NO es posible lograr una verdadera libertad de acción mediante algoritmos matemáticos (es algo de perogrullo). Un algoritmo es, por definición, un proceso determinista (incluso si el algoritmo se computa de un modo no secuencial o en paralelo, da lo mismo)."

Yo no creo eso. Si una funcion diferenciable es determinista pero, bajo circunstancias, sus resultados pueden ser impredecibles a medio plazo (hablo de sistemas caóticos claro), ¿porque eso no va a poder ocurrir en un algoritmo?

Yo trabajo con algortimos fractales, y si los corres 10 veces bajo las mismas condiciones, y aunque todo sea la suma de muchas particulas como en temrodinamica, el simple hecho de que la semilla random sea diferente hace que el resultado del algortimo pueda ser radicamente distinto, y eso que este algortimo siempre busca denodadamente optimizar el mismo "potencial".

Piensa en un algortimo que simule la fisica de un rayo. Tienes un domain de una funcion potencial que quieres optimizar globalmente, es como un campo de trigo con zonas de mas trigo que otras. Pero ese trigo realmente es un potencial, asi que imagina trigo con toma a masa. OK, pones una nube simulado encima, haces funcionar tu algortimo de rayo, y un rayo se forma y cae sobre un buen punto del campo, uno con trigo muy alto.

Por muy buena que sea tu simulacion y muy determinista, cada rayo caera en lugares diferentes, siempre bien encaminados y estadisticamente correctos, pero si tienes varias lomas con trigos similares, varios maximos locales similares, el mismo rayo puede caer en una loma o en otra, casi, digo casi, por puro azar.

Un algoritmo fractal es lo mas caotico que puedes hacer con algo determinista, pero lo es tanto que parece tener libre albedrio. El rayo casi que cae donde le viene en gana. Yo lo pienso como un algoritmo "intuitivo" mas que determinista, ya que mezcla azar, caos y determinismo.

Samu dijo...

Saludos, Sergio.

En lo que comentas estoy totalmente de acuerdo, pero yo realmente me refiero a algo distinto a lo que has interpretado (igual soy yo el que no se ha expresado bien): lo que trato de decir con esa frase, es que es imposible una verdadera libertad más allá de la que el ruido (o caos) físico permite. Pero esa "libertad" basada en la indeterminación caótica no es realmente verdadera libertad, sino una falsa apariencia (que se da también en el cerebro humano, el cual se cree que hace uso del ruido eléctrico de su red neuronal para decidir de un modo pseudoaleatorio en determinadas circunstancias).

No hace mucho escribí un artículo sobre todo esto con mucho más detalle, igual te interesa ojearlo. Es este: http://quevidaesta2010.blogspot.com.es/2015/05/estudio-sobre-la-posible-ilusion-del.html

Es más, estoy seguro viendo tu perfil o nivel de frikismo (muy similar al mío :P), que el artículo este que te menciono te va a encantar, y que vas a ser de los pocos de entre los que lo han leído que lo va a entender en condiciones.

Un fuerte abrazo, y gracias por comentar.

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